Con un báculo de algas y caracolas
como Diosa madre coronada de aureolas.
Me nombro la Emperatriz de lo marino en mí,
de lo espeso que se sumerge en mi feminidad,
del ahogamiento que me convierte en sirena
de la egipcia oscuridad azul del mar.
Entra al silencio que extiende sus habitaciones en esta tornasol oscuridad
Plenilunios transcurren
lo invisible se fermenta.
Ciclos de mujer se escurren
la condesa se despierta.